Niall:
¿cómo que ha tenido un accidente? Perrie, respira hondo y habla. –le dije para
que se tranquilizara y me contase lo que había pasado ya que no paraba de
llorar.
Perrie: salíamos del concierto y
las chicas………
Niall: las chicas… -le dije insistiéndole
un poco, me estaba poniendo nervioso.
Perrie: las chicas se fueron al
hotel y Zayn y yo, nos fuimos a dar un paseo por el centro de la ciudad, fuimos
a cruzar un paso de cebra y…
Niall: ¿qué?, joder… Perrie, ¿y
tú estás bien?
Perrie: sí, yo sí. Fue un
borracho, se saltó el semáforo, Zayn se puso delante cuando lo vio y él se ha
llevado el golpe. No me quieren decir nada, se lo llevaron hace media hora y no
tengo ni idea de dónde está. –rompió a llorar.
Niall: llama a las chicas que
vayan al hospital y llámanos en cuanto sepas algo.
Perrie: … vale.
Niall: vamos para allá. –dije
tajante y colgué.
Me giré y tenía a Bella con cara
de preocupación detrás de mí. Una lágrima caía por su mejilla. Lo había oído
todo. La abracé.
Niall: todo va a salir bien, ya
verás.
(Narra Helena)
Estábamos dormidos uno encima de
otro cuando los gritos de Louis nos despertaron.
Louis: ¡HARRY! ¡HELENA! –gritaba
a grito pelado. ¿Pero a este que le pasa? – ¡VENIR JODER!
Harry se había despertado y los
dos nos levantamos y corrimos hacia donde estaban.
Harry: Louis, ¿qué pasa?
Niall: es Zayn. Ha tenido un
accidente en Chicago, está en el hospital, me acaba de llamar Perrie.
Yo: ¿Qué? –mi cara debería de ser
para foto porque abrí la boca y no la cerré durante un tiempo. Me quedé en
estado de shock, Zayn, mi Zayn, no me lo podía creer. Y además en mi cabeza no
pasaba otra cosa más que el imaginarme lo peor y no. No. Zayn no podía estar
muerto. No porque no.
Harry: no, no puede ser, ¿pero
está bien? ¿Se ha hecho algo? ¡Niall! ¡Contesta joder!
Harry se estaba alterando mucho,
vi cómo se tensaba ya que agarraba mi mano más fuerte de lo que ya estaba.
Danielle: Harry, tranquilízate,
Niall, no sabe nada más, no le presiones.
Liam: Dani tiene razón, así no le
vamos a ayudar.
Eleanor se secaba con la toalla
callada y Louis estaba tras ella dejando que esta apoyase su cabeza sobre su
pecho.
Un silencio incómodo se produjo
durante unos segundos. Nadie sabía que decir o que hacer. Pero el rubio lo
rompió.
Niall: vale, le he dicho a Perrie
que iríamos para ya, pero no podemos ir todos ya sabéis por el revuelo que se
puede causar y eso no vendría nada bien para la situación en la que se
encuentra Zayn.
Bella: raro lo que voy a decir,
pero por una vez, estoy de acuerdo contigo.
Liam: y
yo, vale, ¿quién va?
“Solo enfermeras y personal del
hospital.” Eso era lo que me decían cada vez que intentaba entrar al pasillo
por donde hace unos tres cuartos de hora, se habían llevado a mi novio. Cada
vez, volvía y me sentaba en una de las sillas de plástico azul que estaba en la
sala de espera. Me sentía horrible, me sentía tan culpable. Si Zayn, no se
hubiera puesto delante, no le hubiera pasado nada, y sería yo la que estuviera
tras esas puertas luchando entra la vida y la muerte. Solo con pensarlo, se me
revolvía el estómago. La sala de espera, estaba completamente vacía, no había
nadie, vaya, hoy sería un gran día, no había casi enfermos en esa planta,
bueno, menos él.
Me levantaba una y otra vez dando
vueltas entre las sillas unidas de cuatro en cuatro. De vez en cuando, una
enfermera llegaba a una pequeña recepción que había al principio de la sala y
cogía unos papeles y se volvía a marchar, no sin antes mirarme con cara de
pena. ¿A caso se cree que eso mejoraría las cosas? No Perrie, no, no lo tomes
con ella, no tiene la culpa, la tienes tú y punto.
Lo único que me apetecía en ese
momento, era abrazarle, abrazarle para que no se fuera, como si mi abrazo le
dejase en la vida y no se lo llevase.
Volví a sentarme, pero esta vez,
en el suelo, juntando mis rodillas contra el pecho, la cabeza apoyada en la
pared y las manos cubriendo mi boca y secando mis lágrimas. Al segundo oí que
alguien se acercaba y giré la cabeza al pasillo principal con la esperanza de
que no fuera otra simple enfermera. Y no lo era.
Unos pies asomaban en una silla
de ruedas que era empujada por un anciano celador. El hombre, estaba cubierto
de sangre y con algunos arañazos en las manos. Mi corazón dio un vuelco cuando
en vez de aparecer la persona que esperaba, un hombre de unos 48 años desvió su
mirada hacia mí dejándome ver la cara del gilipollas que le había atropellado.
Un pequeño flashback se apareció
en mi mente recordando el momento en el que la luz de los faros del coche nos
deslumbró a Zayn y a mí y después no recuerdo nada más. El imbécil sonreía y
enseñaba sus dientes sucios y torcidos en señal de victoria, uno de ellos era
de oro, lo que lo hacía más repugnante. Una rotura de rodilla y algunos puntos
en la cabeza era lo que le había costado, le iban a dar el alta, para irse con
la policía a comisaría. Eso me tranquilizaba algo.
Niall me había dicho que llamara
a las chicas, pero yo no le había dicho que las chicas habían cogido el primer
vuelo tras el concierto y que ya no estaban en Chicago. Y no les llamaría hasta
que aterrizaran para no preocuparlas durante el viaje. Yo me había quedado con
Zayn.
Joder si no le hubiera dejado que
se pusiera delante…
Enfermera: ¿familiares de Zayn
Malik?
Subí la cabeza y me levanté al
segundo.
Yo: yo
Enfermera: venga por aquí.
Al fin podía
pasar tras las puertas del pasillo.
(Narra bella)
Íbamos subidos en el taxi
dirección aeropuerto. Al final cómo éramos ocho, habíamos decidido que iríamos
5 y tres se quedaban en la casa, para evitar a los paparazzi. La mayoría de
nosotros no éramos famosos, Liam, Harry y Helena se quedaron en la casa de la
playa y el resto, Niall, Eleanor, Louis, Niall, Danielle y yo, nos íbamos a
Chicago.
(Narra Helena)
La casa estaba más en silencio
que nunca, parece mentira que hace unas horas nos lo estuviéramos pasando
genial y ahora solo había caras largas. Liam y Harry estaban sentados en el
sofá, en silencio. Yo le preparaba un café a cada uno en la cocina e iba hacia
ellos.
Dejé los
cafés en la mesa y me senté al lado de Harry, quien pasó su brazo derecho por
detrás de mi cabeza y me besó en esta. Yo le abracé y nadie dijo nada, todos
esperábamos alguna llamada. Iba a ser una noche muy larga.
No le pregunté a la enfermera
porque, ella no me diría nada, estaba segura, así que me limité a seguirla por
ese pasillo. No me gustaban los hospitales, estaban llenos de tristeza y
sufrimiento. Todo era muy injusto. Antes de nada, le mandé un mensaje a Niall
diciéndole que me habían dejado entrar que luego le llamaba, y guardé el móvil.
Doble hacia la izquierda hacia
otro pasillo más corto, llegamos al final y había una habitación en el lado
izquierdo con un gran cristal antes de llegar a la puerta, el cuál, estoy
segura, que dejaba una clara visión de lo que había dentro. Cuando lo vi, no
pude evitar llorar.
Yo: oh dios mío. –me llevé las
manos a la boca.
Enfermera: tranquila, está
estable y… verás está en coma, los médicos dicen que por la evolución favorable
que está teniendo, despertará de aquí a dos o tres días, esperemos.
La enfermera se fue, le agradecí
eso porque no quería hablar con ella. Zayn estaba tumbado en una cama con un
montón de cables que salían de todas partes y terminaban en su cuerpo arropado
a la mitad con una fina sábana azul clarito. El sentimiento de culpabilidad aumentó.
Miré hacia la puerta y la empujé con cuidado, entré y me acerqué poco a poco a
él. Le veía con esa cara llena de heridas parecidas a las mías pero en mayor
cantidad y lo sentía tan impotente, tan débil… Me senté en una silla pegada a
la cama y le cogí la mano con las dos mías. Yo bajaba la cabeza y me hundía
entre las sábanas depositando pequeñas lágrimas que a la vez caían en su mano,
la cual besaba con cautela cada segundo.
Solo se oía el continuo pitido de
la máquina de su derecha que marcaba la estabilidad de sus latidos.
Yo: … Zayn… sé que no me oyes…
pero,… yo quería decirte que,… eres lo mejor que me ha pasado en la vida, que
me acuerdo del día en el que nos conocimos como si fuera ayer. Y es muy
frustrante porque me encantaría poder revivirlo contigo todos los días, y poder
enamorarme de ti cada uno de ellos.
También me acuerdo de todas las
cosas que hemos pasado juntos, de nuestros momentos malos pero sobre todo de
los buenos… no sé si te acordaras pero yo no he olvidado nada. ¿Te acuerdas cuando
te dio la vena de cocinar y pusiste la cocina perdida de harina incluyéndome a
mí? –sonreí a recordarlo. – Querías sorprenderme con eso, y aunque no lo
hiciste por la comida, lo hiciste por otras cosas, me enamoraste siendo tú
mismo, con tu sonrisa, esa que sabes que me encanta cuando pones la lengua
detrás de tus dientes, con tus ojos, esa mirada que tienes tan dulce, jaja, que
yo la llamo de chocolate… también con tus miradas al espejo, porque el hecho de
que seas un presumido, -sonreí- también me encanta. Empecé a recordar cosas:
Y ya… -se me entrecortaba la voz.
–no, no sé… si voy a poder sentir esas cosas… otra vez… contigo… porque, por mi
culpa estás aquí, si tú no te hubieras puesto delante de mí, yo sería la que
estuviera aquí tumbada y no tú, porque… si hay alguien que no se merece esto,
eres tú. –volví a llorar. –y no sabes lo que me mata verte así. No creo que me
lo pueda perdonar nunca si sales de esta.
Dejé de hablar y besé su mano de
nuevo. Me hundí entre la sábana y su cuerpo depositando mis lágrimas sobre él.
Yo: ¿Por qué? …tú no te mereces
esto Zayn. No…. –lloré profundamente. -Te quiero más que a nada en este mundo.
Dejé que
el silencio se apoderara de la situación y que el tiempo hiciera su trabajo.
“Yo también te quiero más que a
nada en este mundo.” Esa frase sonó en mi cabeza como si el mismo Zayn la
estuviese diciendo. Ojala algún día pudiera oírselo decir. Era demasiado real.
Zayn: Perrie. –Levanté la cabeza.
Yo: dios mío. –me tapé la boca y
le abracé. Estaba despierto. –dios mío Zayn.
Zayn: hola amor mío. ¿Sabes?
Yo: dime. –dije ansiosa.
Zayn: estás horrible.
Los dos empezamos a reír.
Yo: bueno, a mí nadie me ha
curado. –La verdad es que tenía toda la cara derecha con chorreones de sangre
provenientes de la cabeza, pero eso no importaba. –jajaja
Hubo un silencio confortable en
el cual ambos nos miramos.
Yo: Zayn, lo siento, ha sido mi
culpa que tuvieras el acciden…
Zayn: Cásate conmigo.
Yo: ¿qué?
Zayn: que te cases conmigo. Me da
igual que pienses eso porque la culpa la ha tenido ese borracho, tú, eres un
ángel, y si no me llego a poner delante de ti., ese borracho, me quita lo que
más quiero en esta vida, que eres tú. Así que si para salvarte tengo que sufrir
yo, prefiero estar así mil veces antes de perderte. Cásate conmigo.
Yo: ahora mismo si es necesario.
–tengo el chico más valioso de este mundo.
Zayn: ven. -Me acerqué y nos
fundimos en un dulce beso.
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
HOLAA gente ¿qué tal estais?? yo muy bien, espero que os haya gustado mucho mucho el capi porque os confieso que e llorado escribiéndolo asique. Gracias por leer y comentad!
Aww *.* CASATE CONMIGO!
ResponderEliminarQue bonito! No me hagas llorar otra vez así :(
Ha sido perfecto, pobre Perrie.
Zayn es tan adorable. I die!
Siguela quiero saber que mas pasa.
Gracias por avisarme
Un besín <3